Son ópticas de luminosidad razonable, muy resistentes a los destellos, que producen una imagen muy limpia, con un inconfundible iris octogonal que, en contraposición a su rival directo en Zeiss –las Ultra Prime- ofrecen una imagen más suave en todos los aspectos: los bordes no aparecen tan perfilados, el contraste no es tan alto y la transición entre las zonas enfocada y desenfocada no es tan abrupta. Sin embargo, donde más destacan es en su reproducción de color, generalmente más cálido que en Zeiss, así como con los tonos de la piel, muy beneficiados por sus características cromáticas y mayor suavidad.
No obstante, nunca se debe confundir suavidad con menor resolución, puesto que las S4 son capaces de reproducir los detalles más finos de una imagen, solo que lo hacen de forma más delicada que sus rivales alemanes. Por ello, suelen ser ópticas muy apetecibles para películas/publicidades en los que el aspecto de los actores sea primordial, o bien trabajos de época que no requieran imágenes tan nítidas como otros de una estética más realista.